Bloquear permanentemente las actualizaciones de Windows puede ser crucial para los usuarios que requieren estabilidad y consistencia en su sistema operativo. Aunque las actualizaciones de Windows están diseñadas para mejorar la seguridad y el rendimiento, a veces pueden provocar problemas inesperados. Esta guía le guiará a través de los pasos para bloquear las actualizaciones de Windows de forma permanente, asegurando que su sistema se mantiene tal y como lo configuró.
Paso 1: Abra el Administrador de Servicios de Windows
Para empezar a bloquear las actualizaciones de Windows, debe acceder al Administrador de servicios de Windows. Pulse el botón Windows + R para abrir el cuadro de diálogo Ejecutar. En el cuadro de diálogo Ejecutar, escriba servicios.msc y pulse Entre en. Se abrirá el Administrador de servicios, donde podrá gestionar varios servicios de Windows.
Paso 2: Localizar el Servicio de Actualización de Windows
En el Administrador de servicios, desplácese por la lista de servicios hasta encontrar el servicio Windows Update. Los servicios están listados alfabéticamente, por lo que debería estar cerca del final. Haga doble clic en el servicio Windows Update para abrir sus propiedades.
Paso 3: Bloquear los servicios de actualización de Windows
En la ventana Propiedades de Windows Update, localice el menú desplegable Tipo de inicio. Haga clic en el menú desplegable y seleccione Discapacitados. Esto evitará que el servicio Windows Update se inicie automáticamente. A continuación, haga clic en el botón Stop para detener el servicio si se está ejecutando. Por último, haga clic en Solicitar y luego OK para guardar los cambios.
Paso 4: Modificar la configuración de la directiva de grupo
Para garantizar aún más el bloqueo de las actualizaciones de Windows, puede modificar la configuración de la directiva de grupo. Pulse el botón Windows + R para abrir de nuevo el cuadro de diálogo Ejecutar. Esta vez, escriba gpedit.msc y pulse Entre en para abrir el Editor de directivas de grupo locales. En el Editor de directivas de grupo locales, vaya a Computer Configuration > Administrative Templates > Windows Components > Windows Update. Haga doble clic en la política titulada Configurar actualizaciones automáticas.
Paso 5: Configurar la política de actualizaciones automáticas
En la ventana de la directiva Configurar actualizaciones automáticas, seleccione la opción Desactivado. Esto desactivará las actualizaciones automáticas. Haga clic en Solicitar y luego OK para guardar los cambios. Este paso garantiza que, aunque se vuelva a activar el servicio Windows Update, no se aplicarán las actualizaciones automáticas.
Paso 6: Utilizar una herramienta de terceros
Para los usuarios que prefieren una solución más sencilla, el uso de una herramienta de terceros puede resultar eficaz. Una herramienta recomendada es StopActualizaciones10. Esta herramienta proporciona una interfaz fácil de usar para bloquear las actualizaciones de Windows. Descargue e instale StopUpdates10 desde el sitio web oficial. Una vez instalada, abra la aplicación y haga clic en el botón Detener las actualizaciones de Windows botón. Esta herramienta configurará automáticamente su sistema para bloquear las actualizaciones.
Paso 7: Verificar el bloque de actualización
Para verificar que las actualizaciones de Windows están bloqueadas, puede comprobar la configuración de Windows Update. Abra el Ajustes pulsando Windows + I. Navegue hasta Update & Security > Windows Update. Debería ver un mensaje indicando que las actualizaciones están en pausa o desactivadas. Si ha utilizado StopUpdates10, es posible que la herramienta también muestre un mensaje de confirmación en su interfaz.